^{¿Querés conocer a éstos enigmáticos barbudos con turbante?}

En Amritsar, al norte de la India, se encuentra el Templo Dorado. Es un lugar conmovedor por la hospitalidad y generosidad de su gente. Aunque poco conocemos de esta religión, hay una comunidad de 23 millones de sijs en todo el mundo. Aquí te contamos de qué se trata y sus curiosidades.

^{¿Quiénes son estos elegantes hombres de turbante y en qué creen?}

El sijismo nació hace 500 años, en la región de Punjab, al noroeste de India, actualmente limítrofe con Pakistán. La religión fue fundada por el Gurú Nanak Dev, quién estaba en contra del injusto sistema de castas hinduista.
Los sijs creen en un sólo Dios, un Dios panteísta – que está presente en todas las cosas – un Dios que no tiene forma y en el que todos somos iguales ante él.

Además creen en las enseñanzas de los diez gurús que pasaron por la historia del sijismo. Estas lecciones propagan la igualdad entre todas las personas sin distinción de raza, color, género, status o edad. ¿Será por esta equidad, que el estado de Punjab es uno de los más modernos y desarrollados de todo India?

¿Por qué usan turbantes y nunca se cortan el pelo?

Estoy por entrar al Templo Dorado, la mayor Gurudwara – templo sij – de India. Mi amigo Kashmir Singh me cuenta por qué usan turbante: según dice la leyenda, éste se empezó a usar en la guerra para diferenciarse del enemigo y no ser atacado por soldados del mismo bando. Posteriormente se lo consideró un símbolo de la realeza, una corona de rey.

Ponerse el turbante requiere de tiempo y técnica. Consta de una tela de por lo menos 7 metros de largo. Todos los hombres dedican entre 15 y 20 minutos diarios para armar el turbante, que también se ha convertido en símbolo de coquetería masculina, ya que todos los sijs tiene una colección de colores para combinar con sus camisas o pantalones.

 

Las mujeres no están obligadas a usar el turbante, sólo se les pide que cubran su cabeza con el velo cuando entran al templo.
Además de los turbantes, hay 5 elementos que todo sijs debe llevar consigo. Curiosamente todos los elementos comienzan con la letra K.

Kesh: Mujeres y hombres sijs se han de dejar el cabello largo, sin cortar en todo el cuerpo. La mayoría de los hombres tienen el cabello por la cintura, aunque nunca lo vemos porque está oculto debajo del turbante. Para descubrirlo, tienen que volver a ver la película: El Paciente inglés. La escena cuando el indio sij se peina aquel pelo largo hasta la cintura.

Kangha: es un pequeño peine de madera que se esconde bajo el turbante y simboliza la higiene personal.

Kara: es una pulsera de acero que se lleva en la mano derecha para recordar la fé en Dios. Originalmente pesaba 2 kilos, hoy en día son pulseras más pequeñas.

Kachha: es una prenda tipo calzón de algodón que usan mujeres y hombres como ropa interior.

Kinpan: es un sable o cuchillo. En sus orígenes era una espada ceremonial pero actualmente es sólo una daga pequeña que transportan consigo. Incluso han conseguido permiso para llevarla en los aviones cuando viajan dentro de India. No se debe desenvainar nunca para atacar, pero puede utilizarse como autodefensa.

Centro espiritual y el comedor más grande del mundo

El Templo Dorado, además de ser un lugar sagrado para millones de sijs, es la cocina más grande del planeta. Allí se ofrece de manera gratuita comida a quién se acerque, independientemente de la religión que profese. Algún restaurante de la guía Michellin debe estar envidioso del perfecto funcionamiento de este comedor. Da de comer a más de 10.000 personas por día y su funcionamiento depende exclusivamente de los voluntarios que dedican su tiempo a cocinar, servir o lavar cientos de platos las 24 horas del día.

Es 6 de Octubre y se celebra el aniversario del Gurú fundador del templo y Amritsar está de fiesta. Por las calles hay cientos miles de fieles que llegaron de todo el mundo. Los negocios reparten comida gratis: helados, galletas, agua, jugo. Adentro del templo está Kashmir Singh, quién llegó desde Canadá, especialmente para la ocasión.

Me encuentro tomando un chai, el típico té indio, con leche, gengibre y cardamomo. Mientras le pregunto a Kashmir si viene todos los años a trabajar como voluntario del templo. Con una sonrisa me contesta: “No vengo a trabajar, vengo a servir. Trabajar es algo totalmente diferente’’.

El menú que se ofrece a diario para miles de fieles incluye: arroz, verduras, guiso de lentejas y pan árabe. Siempre que te acerques al templo encontrarás una taza de té caliente y un sij sonriente dispuesto a servir.
Además se puede pernoctar gratis en los dormitorios compartidos que ofrece el templo para sus fieles.

¿Necesitás alguna otra muestra de generosidad y hospitalidad para visitar el Templo Dorado?

Todos los sij se llaman igual

El décimo Gurú Sij estableció que todos formarían una gran familia de hijos de Dios con un mismo apellido. Por eso los hombres se apellidan SINGH (príncipe león) y las mujeres KAUR (princesa leona).
Aprender de la diversidad para eliminar fronteras

Muchos sijs viven fuera de India. En Canadá, California y Londres hay comunidades sijs muy grandes. Así como también hay Gurudwaras en España y Francia. En algunos países se los confunde con musulmanes por el uso del turbante. En el año 2012, un tiroteo masivo producido por un joven neonazi estadounidense de Wisconsin asesinó a 6 sijs en el templo de esta ciudad.

En Francia, donde se prohibieron todos los símbolos religiosos en las escuelas, también tienen problemas por el uso del turbante y en España les piden quitárselo para las fotografías del documento de identificación.

A pesar de la discriminación que sufren, la comunidad sij , es de las más serviciales y generosas. En cualquier catástrofe o conflicto verás unos turbantes de colores dispuestos a ayudar.

El Templo Dorado de Amritsar, donde cientos de manos y corazones están puestos al servicio de todos. Un lugar que vibra alto y envuelve a todo visitante con esa energía.

 

 

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